El diagnóstico de un tumor renal abre inevitablemente una etapa de decisiones médicas importantes. Y desde la clínica urológica Dr. Díaz Bermúdez, su urólogo de confianza en Pontevedra, le podemos asegurar que, en estas circunstancias, no hay nada mejor que manejar la información más adecuada. Para ello es indispensable que pida una cita con su equipo médico, que será el encargado de valorar el caso. No obstante, para el cáncer de riñón se abren opciones como las que abordamos en este artículo.
La cirugía es la primera línea de tratamiento
La cirugía continúa siendo la opción principal en los estadios iniciales. El objetivo es extirpar el tumor y preservar, en la medida de lo posible, la función renal. Existen dos tipos principales:
Nefrectomía radical
Se retira el riñón completo, junto con tejido circundante y, en ocasiones, ganglios linfáticos. Puede realizarse mediante cirugía abierta o laparoscópica.
Nefrectomía parcial
Se extirpa únicamente el tumor, manteniendo el resto del riñón. Es especialmente recomendable en tumores pequeños, ya que preserva la función renal a largo plazo.
Ambas técnicas pueden realizarse hoy en día de manera mínimamente invasiva gracias a la cirugía laparoscópica, que reduce el tiempo de recuperación y mejora el postoperatorio.
Terapias dirigidas con las que atacar al tumor con precisión
Cuando la enfermedad está más avanzada, entran en juego las terapias dirigidas. Se trata de fármacos que bloquean mecanismos concretos de las células tumorales, dificultando su crecimiento y propagación. Los inhibidores de la tirosina cinasa actúan frenando la formación de vasos sanguíneos que alimentan al tumor, mientras que los inhibidores de mTOR actúan sobre la división celular. Estos tratamientos permiten controlar la enfermedad y mejorar la calidad de vida.
Inmunoterapia: reforzar las defensas del organismo
Otra alternativa que podemos estudiar en la consulta de nuestro especialista en urología en Pontevedra es la inmunoterapia, que estimula al sistema inmunitario para que reconozca y destruya las células malignas. En casos de cáncer renal se emplean con frecuencia los inhibidores de puntos de control inmunitario, medicamentos que liberan la respuesta defensiva del organismo frente al tumor. A menudo se combinan con terapias dirigidas para potenciar su eficacia.
Radioterapia y tratamientos localizados
Aunque la radioterapia no suele ser el tratamiento principal en cáncer de riñón, sí tiene un papel relevante en determinados contextos. Puede utilizarse con fines paliativos para aliviar el dolor o controlar sangrados en casos de metástasis. La radioterapia estereotáctica de alta precisión (SBRT) es una opción en pacientes no aptos para cirugía.
Existen también técnicas localizadas como la ablación por radiofrecuencia o la crioablación, que destruyen el tumor mediante calor o congelación. Se reservan para tumores pequeños en pacientes que no pueden someterse a una intervención mayor.
Un enfoque personalizado de la mano de su urólogo en Pontevedra
Es evidente que cada caso de cáncer de riñón requiere de su abordaje específico, así que para obtener la información más correcta para su situación, contacte con nosotros y solicite una cita con el Dr. Díaz Bermúdez.